El sonido de un perro aullando es claramente diferente del sonido emito al gruñir o gemir. Los cachorros pueden aullar por varios motivos diferentes. Aullar generalmente no significa dolor o sufrimiento, pero a menudo sirve para aliviar el aburrimiento y la soledad.
Puede ser también una manera de que el perro exprese su frustración. El aullido tiene tonos e intensidades diferentes, variando según el tipo de mensaje que quieren enviar.
El aullido de un perro no es señal de mal agüero o de mal presagio, cómo podemos encontrar en la sabiduría popular, sino un comportamiento heredado de los ancestros salvajes, los lobos. El aullido es una forma de comunicación usada por los perros, que cuando aullan, alcanzan un timbre más alto, pudiendo ser oídos más lejos.
En un lugar con muchos perros, el aullido puede servir para avisar a otros perros que no están en los alrededores con respecto a algún intruso.
El aullido como forma de comunicación
Los perros aullan para intentar comunicarse cuando no hay contacto visual entre ellos. Algunos cachorros tienden a aullar cuando se dejan solos durante algún tiempo. Así, ellos aullan con la esperanza de llamar a sus dueños, que son los elementos de su manada. Muchas veces al oír otros cachorros en la vecindad, son estimulados a aullar también.
El aullido puede ser también una forma de expresar excitación y alegría, como es el caso de los cachorros que aullan cuando oyen música.
Algunas razas son más propensas al aullido, como el husky siberiano, samoieda y malamute del alaska.
Otro motivo que incentiva al cachorro a aullar es la presencia de una hembra en el celo a su alrededor, y teniendo en cuenta que su olor se esparce a través del viento, muchos machos, aun estando lejos, son atraídos, lo que muchas veces da origen a una «sinfonía de aullidos».
Para evitar el aullido en esta situación, es necesario intentar dejar al macho en algún ambiente lejos y, preferentemente, un lugar más cerrado, donde no pueda sentir el olor de esa hembra.
Muchos dueños no se acostumbran al aullido de su perro, y tal vez con más frecuencia durante la noche, ya que perjudica e interrumpe su descanso. Es posible enseñar a su perro a no aullar. El dueño puede hacer el momento del aullido desagradable para el perro, tocando un silbato cuando el perro aulla. También es posible comprar un collar anti-ladrido / anti-aullido, que inhibe al perro de ladrar o aullar.
En último caso, puede contratar a un entrenador, pues un profesional podrá ayudarle en esa situación. Recuerde que el aullido puede ser una señal de frustración, y muchos perros se frustran cuando no practican actividad física. No se olvide de pasear con su perro, haciendo con él una buena caminata.
