El perro guardián de Moscú es un nativo de la raza de la antigua Unión Soviética (ahora Rusia) durante la década de 1950 son perros de gran tamaño con un aspecto se parece bastante a la de un perro .
Su origen se debe al cruce de razas como el San Bernardo y algunas otras razas de perros de caza rusas.
Inicialmente, esta raza fue desarrollada por el ejército soviético con el propósito de ser usada como perro militar, debido a las características que sus razas de descendencia poseían, sin embargo, más tarde se convirtió en un perro de compañía.
Por mucho tiempo, permaneció habitando solamente las tierras rusas, pero, más recientemente, el perro guardián de Moscú pasó a ser más popular y ser más fácilmente encontrado en otros países del mundo.
Es considerado como uno de los más grandes del mundo, siendo su altura entre 64 y 69 cm.
Su peso puede llegar hasta 68 kilos.
El color presentado es blanco y marrón rojizo, como los perros de la raza San Bernardo.
La raza perro guardián de Moscú está en la categoría perros grandes
Temperamento: Perro guardián de Moscú
El Perro de Guardia de Moscú es conocida por ser un gigante con el instinto de guarda y protección muy acentuado, pero ese lado sólo queda evidente cuando el mismo siente que él o su familia se encuentra en alguna situación de riesgo.
Cuando está con sus tutores, este perro se muestra como un animal extremadamente dócil, gentil y muy cariñoso.
Además, su convivencia con otros perros, e incluso gatos, es muy pacífica y difícilmente presenta algún problema más grave. Con niños, el perro de guarda de Moscú también parece tener una relación muy buena, ya que el mismo también es muy juguetón y paciente.
Sin embargo, aunque tenga esta buena relación, no es muy indicado que se quede solo junto con niños o animales muy pequeños, pues debido a su tamaño podrían ocurrir algunos accidentes.
Perro de guardia de Moscú, Personalidad
Este perro posee una personalidad dulce y también se muestra como un perro muy inteligente. Aprende comandos muy rápidamente y siempre está atento a todo lo que sucede a su alrededor.
También es muy enérgico y, por este motivo, difícilmente quedará parado cuando alguien esté cerca.
Cuidados que necesita
Como hablamos en el tópico anterior, es una raza que posee mucha energía. Por lo tanto, para evitar que se quede ansioso o estresado, causando una disminución en su calidad de vida, lo ideal es que realice ejercicios físicos diariamente.
Lo recomendado es que este perro pueda correr libremente durante el día y aún realizar cerca de 40 a 50 minutos de algún tipo de actividad diaria.
Por ser un perro muy inteligente, se puede proponer la realización de algunos trucos que requieran un mayor grado de atención y empeño, mezclándolas con ejercicios puramente físicos.
En el caso del perro de guardia de Moscú, no es muy indicado salir para caminar con él en horarios de gran movimiento, pues, por ser muy fuerte, la probabilidad de que aviste algo y salga disparado haciendo que el tutor no pueda sostenerlo, es realmente muy grande.
Además, por ser un perro realmente grande, el perro de guardia de Moscú es una raza que no puede vivir bien dentro de apartamentos o casas muy pequeñas, por eso, quien piense en adquirirlo deberá poseer un patio trasero bien grande en su hogar y que sea amurallado de preferencia.
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En el caso de cachorros, los cuidados están relacionados a su entrenamiento. Estos perros poseen mayor facilidad de aprendizaje cuando se encuentran en la fase de la infancia.
Hacer un entrenamiento precoz en estos casos evitará dolores de cabeza futuros, haciendo que su perrito entienda desde temprano que debe siempre obedecer a sus comandos, sean cuales sean.
Además, es siempre importante recordar que la vacunación regular y la vermifugación de su perro son importantes para mantenerlo siempre sano.
Salud
Esta es una raza que tiene una expectativa de vida que gira alrededor de 11 años y es considerada saludable por no poseer un historial de enfermedades.
Pero, por ser un perro grande, hay algunas condiciones que pueden afectar, aunque con menor frecuencia.
Una de las más comunes es la displasia de cadera. Esta condición se conoce como una degeneración de los huesos que componen la articulación de la cadera (cabeza del fémur y acetábulo), que causan al perro mucho dolor y disminución de la movilidad.
Esta patología puede ser causada por factores congénitos, hereditarios, exceso de peso, ejercicio físico en exceso e incluso algunos factores hormonales.
Cuando se diagnostica precozmente, la displasia de cadera en perros puede ser tratada a través de terapia medicamentosa y fisioterapia para perros, además de adaptaciones que deben ser hechas en el medio donde el animal vive.
Otra condición que suele afectar a los guardianes de Moscú es la obesidad. Esta puede ser causada por la mala alimentación del animal, sea por la ingestión de alimentos inadecuados o por el ofrecimiento de alimento a voluntad, haciendo que el animal se alimente más allá de lo que es necesario para el mantenimiento de su salud.
La obesidad en perros puede traer al animal problemas de salud secundarios, como la diabetes, por ejemplo, y aún ser un factor de riesgo para el desarrollo de displasia de cadera.
Cómo Cuidar un Guardián de Moscú
No es muy difícil saber cómo cuidar de un perro de la raza de perro de guardia de Moscú, pero hay algunas orientaciones que usted necesita saber.
Por ser una raza muy peluda, es necesario que su perro sea cepillado semanalmente, evitando así que él suelte mucho por la casa.
Estos perros poseen una característica muy interesante, que es la de auto-limpieza.
Por este motivo, los baños deben ser dados solamente de 3 a 4 veces en el año, pues, si se los damos con mucha frecuencia, pueden causar sequedad de la piel del animal, haciendo que sea más susceptible al desarrollo de alergias.
Sus uñas deben ser cortadas una vez al mes, siempre con cuidado para no lastimarlo y sus orejas y dientes verificados periódicamente, para evitar e identificar posibles infecciones.
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Alimentación
Para garantizar la salud de su perro de guarda de Moscú, es necesario siempre mantenerlo hidratado, con agua limpia y fresca a voluntad.
Además, es necesario alimentarlo, preferentemente, con ración específica para perros de gran porte y que le ofrezcan todas las vitaminas y minerales necesarios.
Se debe suministrar alrededor de 3 a 4 comidas diarias, siendo la porción más indicada para su perro verificada en el embalaje de la ración, que traerá una tabla con la cantidad ideal a ser consumida de acuerdo con el tamaño y peso del perro.
Cabe recordar también que, hasta los doce primeros meses de vida de su perro, la ración a ser ofrecida debe ser diferente de la ración que se comercializa para adultos.
